jueves, 10 de octubre de 2013

El regreso de las infantas. Nivel avanzado

Hoy vamos a practicar las diferencias entre "conque" (conjunción consecutiva) y "con que" (preposición + pronombre/conjunción.


- Se acaba de inaugurar la nueva exposición de Velázquez en el Museo del Prado.
- ¡Conque ha empezado ya! Creía que lo haría la semana que viene.
- Pues no, hace tan solo un par de días que se ha abierto por primera vez al público conque ya se le puede echar un vistazo.
- Imagino que irán muchos visitantes.
- Sí, como siempre. Velázquez funciona como un imán para la gente. Basta que se publicite una nueva exposición suya como para que se cree una enorme expectación. Los anuncios en distintos medios con que han publicitado la muestra tienen muy buena pinta. Ten en cuenta que no es fácil reunir un buen número de obras de Velázquez con el que construir una exposición de este tipo.
- Tienes razón, supongo que nunca es fácil hacer una exposición de Velázquez. Además, si no me equivoco, Atanasio, se conservan pocos cuadros de Velázquez.
- Relativamente pocos comparado con otros pintores.
- ¿Y eso?, ¿es que pintaba menos?

- Bueno, hay cierta controversia. Una de las teorías con que especulan los expertos es que se han perdido algunas obras, como las que ardieron en el interior del antiguo palacio real, lo que llamaban el Alcázar de los Austrias, en el siglo XVIII, conque en la actualidad disponemos de menos trabajos suyos de los que debiéramos.
- ¿El Alcázar de los Austrias?
- Era una fortaleza, de origen medieval, que los reyes de la casa de Habsburgo, a los que en España se llamaba, por su origen, los Austrias, fueron ampliando poco a poco a lo largo de distintos reinados, hasta convertir esa fortaleza en un palacio renacentista, y luego barroco, aunque nunca con consiguieron darle un carácter verdaderamente unitario.
- ¿Se les llamaba los Austrias por su origen austriaco?
- En virtud de su origen, ya que procedían de Austria. Esa expresión da nombre también a la zona más antigua de Madrid. No podemos olvidar que fue Felipe II, el segundo de los reyes de la Casa de Habsburgo el que convirtió Madrid en la capital de España. Pero no nos desviemos del tema: en ese viejo alcázar es donde Velázquez sirvió al rey Felipe IV, y pintó la mayor parte de sus obras.
- Y se quemó por completo.
- De tal manera que acabó en ruinas. Se incendió por completo, y se especula con que gran parte de las obras del pintor sevillano desaparecieron junto al edificio.
- Es una lástima.
- Una pérdida irreparable. Si además tienes en cuenta que en los últimos tiempos desempeñaba varios cargos en la corte aparte del de pintor.....
- Quieres decir que trabajaba en otras cosas.
- Exactamente. El cargo con que el rey le demostró su confianza era el de aposentador de palacio. Implicaba ganar más dinero con que vivir desahogadamente, pero también le obligaba a estar pendiente de muchas funciones del día a día del palacio. En concreto llevaba aparejado preocuparse de los suministros, de las obras de acondicionamiento, de un sinfín de problemas y quehaceres. Todo el mundo le venía con que había que hacer esto o lo otro y cada vez le quedaba menos tiempo para pintar. Eso explica que no pintara más obras, probablemente.
- ¿Hasta cuándo estará la exposición abierta?
- Se inauguró el 8 de Octubre, y se cerrará el 9 de Febrero del 2014, aunque apuesto a que la prorrogarán alguna semana más.
- Todavía queda mucho tiempo.
- Sí, hay mucho tiempo para ir, pero no quiero dejarlo para el último día. ¡Conque pueda verla un par de veces me doy por contento!
- ¿Qué tiene de especial esta exposición?
- Pues que se ha conseguido reunir muchos de los retratos de sus últimos diez años, de su época más madura.
- ¿Sólo hay retratos?
- Sólo; de reyes principalmente, pero también hay otros personajes, como el Papa, u otros caballeros a los que pintó en su estancia en Roma, por ejemplo. En el fondo, tanto los de Roma, como los de Madrid son retratos cortesanos.
- ¿Con qué retrato te quedarías?
- Me llaman mucho la atención los cuadros de Viena. Las casas de Habsburgo de Madrid y Viena celebraron varios matrimonios entre sí por esas fechas.
- ¿Por eso hay tantos retratos de infantas allí?
- En aquella época era la forma con que el novio o la novia podían conocer el aspecto que tenía la persona con que se iban a casar y a la que aún no conocían en persona.
- ¿Así que esas infantas que aparecen en los retratos se marcharon a Viena para casarse?
- Así es, conque en cierta forma ahora regresan.
- ¿Y los retratos de Roma?
- Roma era un lugar que a Velázquez le encantaba y a donde viajó siempre que pudo. Bueno, tampoco hay que exagerar, no estuvo allí en muchas ocasiones, sólo dos, pero en ambas pudo permanecer lo bastante como para aprender y disfrutar del ambiente cultural de la Ciudad Eterna.
- Y también disfrutar de libertad, lejos de la corte, ¿no?
- Sí, tienes razón Yangay, sin duda estar lejos de los compromisos y obligaciones de la corte fue un respiro para él. De hecho, tengo la sensación de que su rey, Felipe IV, no contaba con que volviera por su propia voluntad y tuvo que reclamar su regreso.
- Me gustan mucho sus colores. Especialmente la manera con que los distribuye por el lienzo.
- Sí, son muy hermosos los colores de esta etapa, sobre todo cuando retrata a las jóvenes princesas y todo se llena de rojo y azul. En esos casos yo no sé con qué cuadro quedarme. Su dominio sobre el trazo y el color parece llevarle a la liberación.
- Entonces hay muchos más cuadros, aparte de los que pertenecen al Museo del Prado.
- Eso es. Gran parte de los lienzos son préstamos de museos de todo el mundo: de Viena, Nueva York, Paris, Londres, Dallas..., aunque hay muchos que no se han tenido que mover más que unos pocos metros, porque pertenecen al Museo del Prado. Al final el cuadro que ha permanecido en el mismo sitio es el de Las Meninas.
- ¡Conque se iba a mover!
- Tienes razón, te dije que se iba a mover. Me equivoqué porque en realidad podría estar en la exposición ya que es también un retrato, colectivo, pero un retrato, y además pertenece a esta época.
- No importa. Suele ocurrir. En la exposición del Louvre sobre Leonardo, la Gioconda tampoco se movió de su lugar habitual. Ya lo he visto otras veces con otras obras: al principio se rumorea con que van a formar parte de la exposición pero luego nunca es así.
- Efectivamente. Para que los visitantes tengan una experiencia completa del motivo de la exposición convendría que dieran una vuelta por la sala en donde se exponen Las Meninas. De esa forma tendrían una nueva perspectiva con que comparar, sobre todo los cuadros de Viena.
- Me gustaría ver la exposición.
- En este enlace podrás ver un poco sobre ella. En cualquier caso, ya te contaré, Yangay. También me pregunto con qué cuadros de otros pintores completarán la exposición. Me refiero a los que sustituyeron a Velázquez en la corte cuando murió.
- Martínez del Mazo, y Carreño de Miranda.
- ¡Anda! ¡Conque los conoces!
- He visto algunos de sus cuadros, no muchos, a decir verdad, y también me gustan.
- Son buenos pintores, pero es difícil destacar cuando te toca sustituir en la corte a un genio como Velázquez.
- Es verdad. Mazo era su yerno, ¿no?
- Sí, se casó con la hija de Velázquez, por lo que se convirtió en su yerno y en su colaborador preferido. Al morir el maestro, él era uno de los mejores pintores de la corte y el más cercano a Velázquez conque se encargó de finalizar algunas obras que su suegro dejó inacabadas, o al menos eso piensan los expertos. Y también está el joven Carreño, un magnífico artista, que se convirtió en el uno de los últimos grandes pintores españoles del Barroco.
- Espero que la exposición sirva para que se acuerden un poco más de ellos y se les reconozcan sus méritos.
- Sí. Da la sensación de que a veces no basta con que un pintor sea bueno para ser recordado. Hay que acordarse de él.
- Diviértete, y ya me contarás si te ha gustado.
- Lo haré. Hasta luego, Yangay.
- Hasta luego, Atanasio.

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